La COB vuelve a avisar que no permitirá un nuevo “golpe” y ahora pide más nacionalizaciones

El desfile fue convocado por la Central Obrera Boliviana (COB) y participaron el presidente Luis Arce y el vicepresidente David Choquehuanca.

El secretario ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), Juan Carlos Huarachi, afirmó este viernes que la “Marcha por la Democracia y la Reconstrucción Económica”, realizada el jueves, mandó un mensaje claro a la “derecha fascista” respecto a los obreros. “No vamos a permitir un golpe de Estado más en el país”, dijo.

“Saludamos por esa participación masiva, mostrando su respaldo al presidente (Luis Arce) y al vicepresidente (David Choquehuanca), y, por supuesto, también diciendo a esa derecha fascista, tras estos intentos de desestabilización, que los trabajadores, los obreros, petroleros, no vamos a permitir un golpe de Estado más en el país”, afirmó Huarachi durante el acto por los 70 años de fundación de la Federación Sindical de Trabajadores Petroleros de Bolivia (FSTPB).

El máximo dirigente de la COB, en ese sentido, señaló que tras la multitudinaria marcha realizada ayer, ahora toca “seguir profundizando el proceso de cambio” sobre la Agenda Nacional de la Reconstrucción Económica y Productiva para consolidar la “industrialización” de los recursos naturales.

Incluso, según el reporte de medios estatales, Huarachi afirmó que incluso se debe “seguir nacionalizando” algunas “empresas e industrias para los bolivianos” y también cuidar los recursos naturales como la tierra y el agua.

Para el Gobierno, la marcha “establece un blindaje” contra una nueva ruptura institucional

Por su parte, y en separado, el vocero presidencial, Jorge Richter, afirmó que la marcha del jueves mostró la unificación del bloque social-popular en torno al Gobierno nacional y se constituye en un “blindaje” para impedir una nueva ruptura institucional como sucedió, dijo, en 2019.

“Esta movilización es de protección al proceso de cambio, al proceso social y popular del Estado Plurinacional, establecer un blindaje para que no haya posibilidad de una nueva ruptura institucional”, afirmó Richter en declaraciones al programa No Mentirás.

La marcha convocada por la COB y el Pacto de Unidad se dio a raíz de las protestas de autoridades políticas y cívicas de Santa Cruz, que exigen que el censo sea en 2023 y no en 2024, como definió el Gobierno en reunión con el Consejo Nacional de Autonomías, encuentro que contó con la presencia de ocho de los nueve gobernadores del país. El único ausente fue Luis Fernando Camacho, máxima autoridad departamental de Santa Cruz.

Hasta ahora, a la cabeza de las autoridades políticas y cívicas, Santa Cruz acató dos paros – uno de 24 horas y otro de 48 horas-, aunque, según el Gobierno, solo se acató en la ciudad capital. Camacho, sin embargo, ya advirtió con imponer un paro de tres días seguidos.

Al respecto, el presidente Arce advirtió que se busca usar el censo para “desgastar” a su Gobierno y afirmó que la consulta nacional se llevará  cabo de manera profesional y técnica y sin ningún tipo de influencia política.