Nueva Subvariante del COVID-19 con 36 Mutaciones en la Variante Ómicron Bajo Intenso Monitoreo Global

El panorama del COVID-19 sigue siendo fluido y lleno de sorpresas a medida que una nueva subvariante del virus, denominada BA.2.86, entra en el foco de atención global. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha catalogado esta subvariante como «bajo monitoreo» debido a sus 36 mutaciones, lo que genera preocupaciones sobre su impacto en la transmisibilidad y la respuesta inmunológica.

La subvariante BA.2.86 fue identificada inicialmente en pacientes de Dinamarca e Israel, y recientemente se ha encontrado en el Reino Unido y en el estado de Michigan, Estados Unidos. La gran cantidad de mutaciones en esta subvariante ha llevado a la OMS a clasificarla para una vigilancia más estrecha, aunque aún no se dispone de un entendimiento completo de sus implicaciones.

Aunque las investigaciones están en curso, se ha planteado la posibilidad de que esta subvariante pueda evadir parcialmente la inmunidad proporcionada por infecciones previas o vacunas. Jesse Bloom, biólogo evolutivo del Centro Oncológico Fred Hutch en EE. UU., ha sugerido que, según su análisis de las mutaciones, BA.2.86 podría ser tan evasiva como la variante XBB.1.5 a los anticuerpos generados por infecciones con variantes previas.

La variante XBB.1.5 ha sido considerada por las autoridades estadounidenses como una base para las vacunas de refuerzo que se administrarán a partir de septiembre. La subvariante BA.2.86, que cuenta con 36 mutaciones en comparación con XBB.1.5, podría tener una capacidad similar para evadir la respuesta inmunológica.

La detección de esta subvariante en varios países sugiere que podría tener la capacidad de propagarse de manera amplia y haber estado circulando de manera inadvertida durante algún tiempo. A medida que los investigadores profundizan en su genoma y su comportamiento, las autoridades de salud están instando a la comunidad internacional a mantener una vigilancia constante y a adaptar las estrategias de mitigación en consecuencia.

El director general de la OMS, el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, destacó la importancia de una acción global y rápida en medio de la evolución del virus. Hizo un llamado a todos los países a acelerar el proceso de finalización del «Acuerdo sobre Pandemias» para su adopción en la Asamblea Mundial de la Salud en el próximo año. La pandemia de COVID-19 ha dejado en claro que la salud global es un asunto que debe abordarse con colaboración y resiliencia, enfatizó el Dr. Tedros.