Gen denisovano podría estar relacionado con la depresión

Un estudio reciente realizado por investigadores del Instituto de Biología Evolutiva (IBE) y del Departamento de Medicina y Ciencias de la Vida (MELIS) de la Universidad Pompeu Fabra (UPF) ha descubierto que una variante genética heredada de los denisovanos, una antigua especie humana extinta, podría estar relacionada con un mayor riesgo de depresión y otros trastornos mentales.

El gen en cuestión, SLC30A9, es fundamental en la regulación y transporte del zinc a través de las membranas celulares, un mineral esencial para el crecimiento y el funcionamiento adecuado de los sistemas neurológico e inmunológico.
Los investigadores observaron que esta variante genética, que probablemente evolucionó a través de la selección positiva, afecta la regulación del zinc, especialmente en poblaciones de Asia oriental.
Experimentos de laboratorio realizados por el equipo demostraron que esta variación estaba relacionada con diferencias en cómo ciertas estructuras celulares, incluyendo las mitocondrias, procesaban el zinc, lo que podría influir en su efecto sobre el metabolismo.
Los investigadores también sugieren que la evolución ha favorecido la conservación de SLC30A9, aunque no han identificado claramente los beneficios que podría proporcionar. Ahora, parece ser que la variante denisovana nos ha brindado una mejor protección contra climas fríos, «representando una ventaja selectiva a los humanos», afirma el biólogo evolutivo Jorge García-Calleja de la UPF. «Como resultado, esta variación en el gen SLC30A9 se ha extendido a las poblaciones actuales».
La misma variante SLC30A9 ya se había vinculado con un mayor riesgo de depresión y otros trastornos mentales, por lo que la genética heredada de los denisovanos estar estrechamente relacionada con nuestra salud mental.
Esto, de igual forma, estaría relacionado con la regulación del zinc, que influye en la excitabilidad del sistema nervioso y tiene conexiones con la salud mental, un aspecto que los científicos desean explorar en mayor profundidad.
Los resultados del estudio, publicados en la revista PLOS Genetics, sugieren que la herencia genética de los denisovanos podría haber tenido un impacto significativo en nuestra salud mental. Sin embargo, se necesitan más estudios para confirmar estos hallazgos y comprender mejor los mecanismos biológicos que subyacen a esta asociación.