SE LOGRÓ IDENTIFICAR RESTOS ÓSEOS DE UNA MUJER Y SU BEBÉ ENCONTRADOS EN SAN IGNACIO

Benancio Amena Flores (72) y Nicolas Manaca Muruba (52) fueron los vaqueros que encontraron ayer los restos óseos de una mujer y un recién nacido, reportados como desaparecidos en el municipio de San Ignacio de Velasco.

Los pobladores de la comunidad Cochabambinita se encontraban pastoreando sus animales cuando un fuerte hedor centró su mirada a un lado de la carretera de tierra y al acercarse evidenciaron la existencia de una chinela semienterrada y restos óseos de un cuerpo humano, dando aviso de inmediato al cacique de la zona.

El comandante de Frontera Policial Alejandro Meneses, informó que se envió personal a escena del crimen de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia, quien retiró los restos de dos personas, uno adulto y una bebé de días de nacida. Ante el hallazgo se comunicó de inmediato a los familiares de una muchacha desaparecida el 6 de junio pasado, quienes se trasladaron hasta el lugar y confirmaron que se trata de J. Y. G. M. y su bebé de 25 días de nacida.

La madre de la víctima y abuela reconocieron la chinela de la joven, prendas de vestir de la bebé y una toalla que solía usar para limpiarla.»Es bastante doloroso tener que mostrarles esto pero teníamos que hacerlo. Lo que nos deja tranquilos que, hay una pareja detenida en Palmasola como principales sospechosos de la muerte de la muchacha y su bebé», dijo Meneses.

La abuela de la víctima que no resignaba la muerte de su nieta pidió a las autoridades aplicar el máximo castigo para los sospechosos, teniendo en cuenta que mataron a una bebé inocente.»Cuatro meses estuve buscando a mi hija y hoy (sábado) la reconocí por sus chinelas y la ropa de la bebé», dijo visiblemente afectada por la noticia.

Meneses explicó que pese a la identificación de la familia, los restos óseos serán enviados a la morgue de la Pampa de la Isla en Santa Cruz para que sean sometidas a un examen forense y se pueda determinar con certeza la identidad de la víctima y las causas de la muerte.

Según antecedentes, el padre de la bebé José Luis C. P. y pareja de la joven de 17 años asesinada, aparece como sospechoso de la desaparición junto a su expareja, quien vivía amenazando constantemente a la víctima por haberse metido con su pareja.