Gesto maternal: tras rescatar a bebé de una venta, sargento Delicia no duda y la amamanta
La infante habría sido comercializada por su padre por la suma de 2.000 bolivianos, en la ciudad de Santa Cruz. Efectivos de la FELCC arrestaron a la mujer que habría comprado a la recién nacida.
Se trata del gesto maternal del día. Una sargento, dependiente de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de Santa Cruz, es quien da el ejemplo. Delicia Ávila Calucho, de la División de Trata y Tráfico, amamantó a una recién nacida que fue rescatada por la Policía, en el oriente, tras, presuntamente, haber sido vendida por 2.000 bolivianos por su progenitor.
Las imágenes de aquel instante dan cuenta del gesto instintivo de la uniformada, que al notar que la pequeña lloraba por hambre, atinó a desprenderse algunos botones de su blusa para posteriormente dar de comer a la bebé.
De acuerdo con las investigaciones preliminares de la entidad verde olivo, la niña fue rescatada este lunes, en horas de la tarde, en el mercado La Ramada. «Se procede al arresto de Faustino C.M., quien habría puesto en venta a su hija por la suma de 2.000 bolivianos», detalló la Policía.
En la zona Los Lotes, situada a la altura del surtidor Octano, fue recuperada la infante, que estaba bajo el poder de Carmen C. Se presume que esta mujer habría comprado a la recién nacida. Fue llevada a celdas de la FELCC.
La pequeña fue llevada al Hospital del Niño. Sin embargo, en el ínterin, lloró por hambre. Fue entonces cuando la sargento la cargó en sus brazos y procedió a alimentarla con la leche de su pecho.
Fue la misma Policía Boliviana la que resaltó la tarea. «Es ahí que emerge el amor maternal y vocación de servicio de nuestra sargento Delicia Ávila Calucho, quien sin mediar ninguna situación «amamanta» a la pequeñita hasta que se tranquiliza, para después entregarla a los profesionales médicos y la Defensoría de la Niñez».
La División Trata y Tráfico de Personas de la FELCC da curso a las investigaciones.
«ME PARTIÓ EL ALMA»
La sargento Delicia se vio conmovida con la bebé víctima de trata. Confesó que la quebró emocionalmente verla indefensa. «Me partió el alma escuchar cómo lloraba (…). Todos los niños son un ángel y, al igual que los ancianos, merecen una calidad de humana. Yo tengo un bebé de cuatro meses. Soy madre primeriza y verla llorar, con dificultad para respirar, tocó mi corazón», dijo, en declaraciones a Clave 300.1.